Muchas veces consultamos pacientes que presentan patología del tallo capilar, como por ejemplo; la Tricorrexis, con la consiguiente fractura del pelo. Esta patología, no esta relacionada con disfunción del folículo piloso, pero puede causar pérdida considerable de la masa capilar, que frecuentemente confunde a estas mujeres con algun tipo indeterminado de alopecia.
Su diagnóstico y tratamiento correcto suelen resolver en poco tiempo el problema.
La falta de información hace que muchas de las mujeres que sufren alopecia, intenten detenerla por sus propios medios. Solo cuando han pasado por varios tratamientos sin éxito, se dan por vencidas y acuden a un profesional.
Como la caída del cabello no parece amenazar la vida, la mayoría de los médicos prestan poca atención a las quejas de las mujeres acerca de la pérdida del cabello y esencialmente, dicen a sus pacientes que «no es gran cosa», y que «vas a tener que vivir con ello».
Por supuesto que lo que estos médicos no parecen darse cuenta es que el daño psicológico causado por la pérdida del cabello y sentirse poco atractiva puede ser tan devastador como una enfermedad grave, y de hecho, puede tomar un curso emocional que afecta directamente a la salud física.
Se ofrecen cientos de productos y “tratamientos milagro” en el mercado que aseguran detener la caída o regenerar el pelo. Es posible que algunos ayuden a mejorar la calidad general o a dar un aspecto más vivo al cabello, pero eso no significa que solucionen de raíz el problema.
La pérdida del cabello que podría haber sido temporal, puede llegar a ser de larga duración o permanente, como resultado de un diagnóstico incorrecto.
El potencial de tales diagnósticos erróneos, es quizás el aspecto más frustrante de la pérdida del pelo en las mujeres.